El lugar donde he sido mandado a vivir sin ninguna experiencia previa en el medio de la más huérfana inconstancia. El que me obliga a tomar por sorteo hasta la más inocente de mis decisiones, como la de creer en la más pálida idea...

enero 27, 2010

El horror laboral


Los recientes suicidios en la Telecom francesa fueron el síntoma imposible de desconocer. El filosófo argelino Sidi Mohamed Barka concluye que “El trabajador ha sido transformado en una especie de empleador de sí mismo”

Una de las consecuencias humanas de las recetas neoliberales aplicadas al trabajo son los daños provocados por el acoso laboral y la presión individualizada en las organizaciones empresariales. El trabajador es sometido a presiones brutales bajo la amenaza latente del bendito despido por ajuste. Se acostumbra a privatizar e individualizar la competitividad haciendo responsable al trabajador por “objetivos” o “resultados” de la empresa. Sobre el trabajador, que recibe relativamente buenos sueldos y beneficios en un determinado puesto, se focaliza una sobrepresión deliberada para exponerlo casi cotidianamente a la situación de jugarse su puesto al tener que atravesar sucesivas “pruebas” de rendimiento totalmente desgastantes. Es como estar jugando todos los días un partido eliminatorio cuando lo que está en juego es nada menos que un puesto de trabajo bien remunerado que el trabajador sabe va a ser muy difícil reemplazar.

En las listas de requerimientos de cualquier aviso laboral es corriente hoy día ver como requisito básico solicitar “capacidad de trabajo bajo presión”. Todas estas tácticas perversas tienden a aumentar la productividad normal y natural del trabajador, sacarle una “extra” que vaya por sobre las horas y dedicaciones establecidas y permita obtener un plus sustancial que obviamente no es pagado. Se valúa que el stress causado por el temor a la pérdida del puesto y a la exposición pública del fracaso aumenta la productividad del trabajador, sin tener en cuenta que también aumenta del deterioro de su salud psicofísica. A menudo se suele hacer competir por la supervivencia a individuos o grupos de la misma empresa que son convocados a verdaderas guerras de eficiencia cuyo botín es la salvación exaltada para unos y el despido oprobioso para otros.


enero 26, 2010

El secreto de tu supervivencia


Mini-tesis de verano, ligeras y oblicuas.

"Si quieres sobrevivir como sistema, mantén vivos y bullangueros a tus enemigos"

La supervivencia del capitalismo se debe a su imperfección; a su grado creciente de
tolerancia y a sus estrategias de neutralización. Que de ningún modo mitigan la contundencia de su poder y la gravedad de los daños que sus valores y desigualdades provocan, pero que le permite funcionar con una válvula de retención que evita que los flujos negativos de energía que genera se vuelvan en su contra. La pretensión de perfección mata a los totalitarismos absolutos, el sueño de aniquilar a todos sus enemigos se vuelve imposible y su intento en el peor de los boomerangs; el secreto del capitalismo, en cambio, es que los deja vivos, bullangueros y entretenidos.

enero 24, 2010

La imposición de los relatos


¿Se puede instalar y sostener una operación mediático-política basada en una mentira torpe?

Parece que si cuando esa mentira es coreada a viva voz por varios medios masivos en el mismo acorde y con la misma melodía. Si a eso le sumamos la escasa difusión de la narración contraria que actuaría como natural antídoto, el efecto del envenenamiento de la mentira es abrumador y letal. Los que adhieren, animados por el odio más que por la razón, la toman sin filtro, sin someterla al control de un mínimo razonamiento sereno, la hacen dogma de fe al recibirla casi como un arma. Puesto que está ahí y es funcional a sus fines la dan por cierta. En el caso Redrado y la pelea por el uso de reservas del Banco Central esto ha sucedido de modo espectacular. Se trató de una articulación de eventos muy diferente por ejemplo al conflicto del campo del 2008 cuando el relato mediático interesado se fue construyendo e imponiendo a medida que el proceso del conflicto crecía. Y era un diferendo que poseía una base de sustentación material real, una lucha sectorial que se había establecido territorialmente en términos más o menos habituales para este tipo de pujas: un gobierno que establece un aumento de un gravamen, un sector afectado que protesta y las cosas que comienzan a crecer hasta volverse un conflicto de toda la sociedad. Aquí en el caso Redrado la operación nace de la nada misma, es una construcción intelectual absolutamente palaciega que opera basada en una interpretación tecnicista de una medida de la que resulta toda una trabazón político-judicial que de pronto se instala como relato perfecto y ajustado. Los simpatizantes de las derechas sumados a todos los tipos de antikirchneristas -adherentes concientes e inconcientes- terminan legitimando este relato simplificado, falaz y fabulesco. Un cuentito perfecto cual novelita rosa: había una vez un gobierno feroz que quería usar los ahorros del país para pagar deuda y vino el muchachito blanco a salvarlos con su honestidad de funcionario intachable. Es increíble como han logrado desvirtuar y silenciar lo hecho por este mismo funcionario en 2006 por ejemplo, hecho que bastaría para refutar toda la maniobra y exponerla como lo que es; una burda patraña destinada a entorpecer la capacidad ejecutiva del gobierno y debilitarlo a fin de facilitar su caída.

Circulan varios videos donde aparece el propio Redrado anunciando el uso de reservas a fines 2005 y principios de 2006; pero como esos videos fueron propalados por programas considerados afines al gobierno, prefiero usar unos enlaces a artículos que el propio diario La Nación, uno de las capitanes de la ofensiva anti-K, publicara en su momento:


Aquí el anuncio de la creación de reservas de libre disponibilidad que luego habilitarían en pago al FMI en 2006.

Aquí la noticia del nuevo uso de reservas para pagar al Club de París aprobada por el mismísimo Redrado en septiembre del 2008, hace apenas poco más de un año y en pleno gobierno de Cristina, ofreciendo argumentos y todo.



enero 23, 2010

Veranos futboleros II


El mito de las repatriaciones estelares

Otro capítulo recurrente cuando llegan los recesos es la fantasía de los equipos grandes argentinos con la repatración de futbolistas ya veteranos que juegan en Europa. Detrás de estas supuestas incorporaciones de primer nivel de esconde un uso perverso de las famas adquiridas y una experimentación de reciclado destinada al más estrepitoso fracaso ya que los que llegan lo hacen totalmente destruidos en su capacidad prestadora.

En el viejo continente parecieran contar con una eficaz y misteriosa tecnología para saber medir con exactitud cuando un futbolista llega al final de su vida físico-atlética útil, cuando está al borde de la obsolescencia. En cuanto toman cuenta de este dato, estos jugadores son liberados y sus pases entregados por poca monta al mejor postor. Uno de sus destinos son estos retornos sin gloria y con los músculos al límite que aquí son presentados como esforzadas adquisiciones estelares, sueños cumplidos de regreso triunfal del hijo pródigo. En realidad se trata del reciclado de carne futbolera agotada y clasificada como prescindible por los clubes europeos. Estos futbolistas regresan y en general no pueden cumplir ni con el 25% de los partidos programados ya que a poco de rodar manifiestan lesiones y desgarros insalvables que los mantienen largos períodos alejados de las canchas. Sirven políticamente para calmar ansiedades de las hinchadas al comienzo de la temporada, ya que luego sus bajas son atribuidas a la mala suerte de las lesiones. Quién siga el fútbol italiano verá por ejemplo la fatigada explotación a la que ha sido sometida en más de una década la energía muscular de Javier Zanetti, un corredor que acumula un equipos italianos un kilometraje descomunal. Imaginemos el estado en el que quedará cuando allá los instrumentos marquen su pase a desguace; llegarán de él los jirones de vaqueteados cuadríceps y aductores. Esperemos que nadie celebre acá su regreso con frases rimbombantes.

Veranos futboleros I


Boca Juniors 2010.

Amor Ameal, Bianchi, Riquelme y Basile han llevado al equipo a la ciénaga de las sonantes derrotas producto de la confluencia de imbecilidades.

Si los dirigentes querían que fuera técnico ¿para qué lo contrataron como manager al pelado más agrandado de la tierra? Una contradicción insostenible es requerir contractualmente los servicios de alguien para una función y estar todo el tiempo acosándolo con pedidos para que haga otra diferente. El susodicho semidiós -un afortunado DT de fútbol defensivo que ascendió a la categoría de Sabio Omnipotente con veleidades de mega empresario, algo así como el Valdano de Sudámerica- compartió rango y función gerencial con el triste diácono de la indolencia, el jugador llamado Riquelme. Aparte de la condición de deidades intocables compartían el curriculum de estruendosos fracasos europeos: al técnico nunca le funcionó el celular de Dios allá en Europa, el mismo que aquí transformaba a los picapiedras desahuciados en jugadores rendidores, y al enganche no le toleraron sus prerrogativas de divo díscolo y sus pretensiones de anteponer a todo el deseo de ser feliz. La llegada del irascible noctámbulo Basile no hizo más que agregar nafta a la fogata mitológica ya que su “manejo de vestuario” esta vez no pudo hacer nada frente a semejante constelación de soberbia mal habida en ebullición. Y como si fuera poco, se trajo a Abbonzanzieri, un arquero que en su pasada época de apogeo llegó a ser apenas correcto. Esta vez llegó en plena y abrupta decadencia física tras haber sido eyectado de un equipo español. Su regreso fue presentado como estelar y se lo dejó librado a su terrible falta de autocrítica y de criterio para darse cuenta que no puede más.

Los dirigentes y ambos managers sentían la necesidad de sacarse al Coco de encima.; así fue que retrasaron todo lo posible la llegada de algún refuerzo interesante. Y a juzgar por las últimas actuaciones del equipo –defensores que parecían tenderle alfombras a los delanteros rivales para que llegaran al gol- el plantel también se quería deshacer rápido del imbancable Coco vaya a saber para qué. Ni siquiera le alcanzaba la chapa al ronco coach para hacer que una novata promesa como Gaitán aceptara la orden de pasarle la pelota a sus compañros y no buscar desesperado su gol como camino a una mejor cotización europea.

En definitiva, todos juntos transformaron a Boca Juniores en un refugio de veteranos engreídos dispuestos a malgastar fenecidas reservas resultadistas exponiendo sus opacos presentes. Un manto de limpieza implicaría deshacerse de ambos semidioses paganos y de todos los veteranos refugiados para armar un equipo de fútbol terrenal, desde el barro de la humildad.

enero 21, 2010

Atendido por sus propios dueños II


Las cosas se van acomodando. En Chile un dueño -Sebastián Piñera- se dispone a atender personalmente su negocio. Un país cuya mejor reputación era la de ser el modelo latinoemericano más presentable para el poder económico internacional, ahora tiene un presidente que se ajusta con mayor fidelidad a su naturaleza: empresario exitoso y neoliberal. Atrás quedaron los tenues híbridos de la Concertación que durante tanto tiempo atemperaron las fogosas corrientes neoliberales para hacerlas un poco menos salvajes. Alguna vez se tenía que acabar esa espina que llevaba el mote de “socialdemócrata” cuya semántica suena moralmente interesante pero puede llevar a la gente a confusión; con los años existe un cierto peligro de que sea bien vista y alguien se acuerde que en el fondo consiste en una especie de izquierda. Ahora volverán las oscuras recetas neo a practicarse a viva voz y con orgullo; en su plenitud atlética, libre de limitaciones moderadoras: flexibilidad laboral y salvajismo de mercado en lo interno, postura pasiva para obedecer los mandatos del poder económico internacional, privatizar todo lo privatizable y aún más.

Para un país exportador de productos primarios, adherir a las recetas neoliberales garantiza un cierto grado de avance que rápidamente encuentra su techo: en lo económico jamás se transforma en desarrollo al ser un modelo dependiente, inestable y transitorio, y en lo social no supera un standard muy duro de desigualdad sumado a una atmósfera cultural cargada de individualismo, clasismo y agresividad. Los ecos del triunfo le llegaron aquí a Mauricio Macri que enseguida se permitió soñar despierto: que hermoso sería una competencia electoral sana y fraterna sólo entre entre derechistas; una compulsa entre estilos de gestión empresarial llena de colorido marketing donde equipos de yuppies harvarizados se devanarían los sesos para pergeñar grandes negocios.


enero 19, 2010

Urge fluir


Una breve parrafada probablemente anacrónica cuyo rescate se debe a la labor encomiable de los restauradores.


"Urge fluir desde las trincheras algodonadas donde resistimos adormeciendo la esperanza. Basta de ver pasar los pies de los que arrasan nuestro teatro de emancipación. Podemos derramarnos inclementes sobre la realidad para tomarla por sorpresa, tan ajena que viaja a nuestro plan, extraviada en su omnipotente exhibición. Apuesto a que el Viejo Observador decapitado notará la diferencia"


enero 17, 2010

Atendido por sus propios dueños


¿El siglo XXI será el siglo de los millonarios lanzados a la misión de ejercer directamente el poder político? Parece que finalmente han descubierto una obviedad: que todo puede comprarse, comenzando por lo más fácil de comprar que es la opinión pública. Y si se cuenta con ella, ¿que sentido tiene usar intermediarios?

El Washington Post, otrora un oasis de prensa "independiente" –dentro de lo que se puede ser progresista e independiente en los Estados Unidos- ahora es directo vendedor de prestigio a notas pagadas por un mecenas, un multimillonario de Wall Street llamado Peter Peterson. Parece que en aquellos lares la crisis de ventas de formatos tradicionales de papel vuelve a medios prestigiosos muy vulnerables al poder financiero, y les va a ser muy difícil no opinar a favor de quiénes paguen su supervivencia.

Otra corriente de pensamiento avanza en su difusión. Se llama –aunque usted no lo crea- “Filantrocapitalismo”. Tal el título del libro donde Matthew Bishop y Michael Green explican sus novedosa propuesta que dice más o menos así: a los problemas de la humanidad los van a solucionar los grandes millonarios poniendo parte de sus inconmensurables fortunas al servicio de un juego que sería algo así como el de salvar al mundo.

En las tierras hargentinas, donde las leyes de la metrópoli no llegan todavía, los holdings multimedios son tan pero tan poderosos que ya están en pleno ejercicio de una revolución.

¿Que hubiera sido de Cristina, por ejemplo, si se hubiera reunido todas las semana a tomar el te en buenos términos con Doña Ernestina? Seguramente millones de argentinos que creen que piensan por si mismos al llamarle “Yegua” la llamarían "La Señora que nos hace quedar bien en el mundo”


A bordo del borde


Preguntas, búsquedas, fugas. El mundo de los seres incompletos está plagado de conceptos y objetos asociados al inconformismo irresponsable. Un aventurero, que en vez de proponerse ganar el Dakar, se propone encontrar la puerta del mar. Otro, más cientificista y supuestamente más adaptado al mundo embargado tras la utopía del éxito, elige encontrar la dimensión de la gloria en vez de la dimensión de alguna de las partículas sub atómicas. Las conquistas dentro del mundo tal como es, incluyen una alta dosis de utopía, pero se cierran como coherencias irrefutables en la especificidad del realismo mercantil. Navegar a favor de la corriente o de los vientos predominantes facilita en un cincuenta por ciento cualquier epopeya colonizadora.

¿Donde y cuando terminan los comienzos? ¿Cuando realmente ocurre el final de una era, a punto de que ya nada podramos temer sobre su continuidad?

Los seres incompletos somos mayoría; pero adherimos al silencio a causa de la compasión que nos dirige a una lucha contra el enemigo incorrecto. Los que salen a ducharse de sol a la luz de un pobre paisaje natural, ajeno de toda propiedad y transformación, y escriben la novela destinada a los anales de la literatura que se llama las Aventuras Del Padre Eco y su Coro de Tormentas. El tesoro épico y social que animaba a los espíritus y era capaz de exaltarlos a punto de hacerlos ver más allá de sus narices se ha transformado en un vulgar bidón de alcohol barato incapaz de convocar más que una faena inconciente de hedonismo individual. ¿Serán los poetas los únicos y nuevos renegados de la era egocéntrica, que planteando negaciones por doquier aparte de ser inútiles se vuelven irritantes?

Mañana tal vez cesará la noche, y entonces nos asomaremos tan solo a preguntar en que posición estamos. Con estar un poco más adelante que los últimos, nos aseguraremos un festejo inconfesable.

enero 11, 2010

Mandamiento cultural


Es una recurrencia insalvable del mundo cultural hargentino; un mandamiento obstinadamente acatado: toda vez que aparece un mega éxito kistch típico de la industria del entrepudrimiento mediático, en menos que canta un gallo se agita la pluma algún escritor ever ready -no por las pilas sino por siempre listo- para escribir el correspondiente artículo a modo de ensayo sesudo que incluirá obligatoriamente una relación del personaje de turno con algún prócer cultural. Siempre hay un Sabio a mano para explicar cualquier tilinguería. Desde un chabón que hace fortunas pateando pelotas al que se lo relaciona con Niezstche y Hegel, hasta una escandalosa representante del culopower que boconea querellas por todos los canales a la que se liga con Simone de Beauvoir y Lacan. Ahora le tocó el turno a Ricardo Fort, y Daniel Guebel escogió nada menos que a Rimbaud para hacerle pareja, amén de unos desopilantes intríngulis filosóficos.

(Vía El fantasma)


enero 09, 2010

Rumores


Cuando uno escucha un estruendo alrededor de un conjunto de humanidades, ¿como saber si es el estallido de la vitalidad o sólo el potente rumor de la caída?


enero 07, 2010

Oferta


Se ofrece un destino extraviado. Es desconocido, no tiene casi uso y está bastante bien equipado. A menudo se embriaga en el exceso de portentosos objetivos; pero otras veces suele yacer apagado sin poder articular emisión alguna de desvío.

Tratar en el transcurso de todo este nuevo año.