El lugar donde he sido mandado a vivir sin ninguna experiencia previa en el medio de la más huérfana inconstancia. El que me obliga a tomar por sorteo hasta la más inocente de mis decisiones, como la de creer en la más pálida idea...

noviembre 30, 2009

La burbuja más lujosa del mundo


Una nueva burbuja del lujo capitalista parece que acaba de estallar. Le tocó el turno al paraíso de las más delirantes inversiones inmobiliarias. Después que los gurúes neoliberales se quedaron afónicos de tanto gritar sus predicciones apocalípticas en los países latinoamericanos considerados peligrosos por no tener gobiernos obsecuentes, sucede lo que sucede en Dubai, uno de los Emiratos Arabes Unidos. ¿Hubo alguna prevención del FMI al respecto? ¿Qué tal las calificadoras de riesgo? Los Emiratos Arabes Unidos eran un país que a los ojos de los citados voceros del neoliberalismo debería ser considerado “ejemplar”; un sabio y maduro atractor de siempre beneficiosas inversiones. Después el hecho que sea un estado donde no existen ni elecciones ni partidos políticos y siete emires todopoderosos se dediquen a hacer negocios y gastar su dinero en obras faraónicas mientras su población pasa necesidades básicas, es un dato menor. Curioso es que ningún guardián de la democracia de occidente salió a quejarse ni se les ocurrió hacerlo destinatarios de su tan vocacional exportación de la democracia.


noviembre 29, 2009

Homus Setentensis



Hay personajes que encajan como en los estereotipos sociales y generacionales como si hubiesen sido diseñados para ello. Son lo que se conoce como "casos de libro", aunque podríamos llamarles, más a tono con un léxico actual, "personajes de diseño". Es el caso de este tal Gustavo Plis-Steremberg: típico delirante setentista, encima músico y loco, ex militante del PRT que se volvió director de orquesta y "triunfó" en Rusia y en entre otras cosas, en un concierto le negó el saludo a Margaret Thatcher, y ahora es capaz hasta de expresar un sensato pensamiento sobre la izquierda argentina.

"Veo a la izquierda y me da vergüenza. Porque acá la izquierda es fundamentalista, tiene un montón de clichés y lanza consignas irrealizables”

¿Existirán más ejemplares así o se habrán extinguido en la mutación ordinaria?


noviembre 28, 2009

El blog: la simulación que se convierte en lo simulado


En un espacio llamado No-retornable Genovese presenta una reflexión acerca de internet y la literatura que incluye como uno de sus centros el fenómeno blog. Mientras digiero reflexivamente las jugosas puntas que despliega su texto, se me ocurre poner sobre la escena la lectura de uno de los atributos blogueros:

Las modernas tecnologías informáticas han revolucionado el campo del regocijo lúdico como proyección de deseos y vocaciones no desarrolladas en el campo de cruel selección de la realidad; los juegos de simulación realista son uno de los fenómenos más notables. Quién alberga, por ejemplo, una pasión no del todo realizada por el militarismo y la violencia, puede embarcarse en la nave escapista de los espectaculares juegos de simulación de combates, guerras y conquistas por diferentes escenarios donde es posible repartir disparos y masacrar un número apabullante de personas. Lo mismo para amantes del automovilismo o la aviación que no han podido acceder a roles sociales capaces de ponerle un acto ejecutivo a esas pasiones, cuentan con herramientas de sencillo acceso que les permiten reproducir con bastante fidelidad las sensaciones que se obtendrían aterrizando un Boeing 737 en el aeroparque metropolitano o manejando una Ferrari de Fórmula Uno por las calles de Mónaco. Los amantes de la escritura, en cambio, no disponen de tales opciones de juego, pero han encontrado el blog, que es un juego donde se simulan operaciones que hacen a la perfomance de un escritor, pero donde el grado de realismo traspasa el límite de la representación para que la simulación se vuelva lo simulado. Jugar al blog sería como jugar al Counter Strike en la calle con balas de plomo o a la F1 con autos que en efecto recorran calles y hagan ruido, o volar en aviones que efectivamente aterricen.

La particular sencillez de la física del acto de escrilectura hace posible este traspaso de un juego de simulación a un tipo de acción real. El blog gana así una condición propia, exclusiva y deslumbrante en relación a su capacidad de instituyente comunicacional: es capaz de dotar de realismo efectivo a un acto de mera ficción, que no aterra ánimos dada la presunción de la inocuidad de sus consecuencias, pero que irrumpe como un quiebre en las estructuras de producción de realidad.


noviembre 22, 2009

Reservorios de coerción


«Un día, el siglo será deleuziano», fue la expresión de Michel Foucault. No se que a siglo se refería el pelado Michel pero este siglo ya es deleuziano desde sus comienzos.

Había una vez un mundo lógico. Un mundo que era una mierda de frente y de perfil, pero donde existía una izquierda que se ocupaba de intentar mejorarlo sin conseguirlo y una derecha que se empeñaba en empeorarlo con el mejor de los éxitos. Había una vez un mundo cuya maqueta conceptual eran dos bandos en guerra; dos visiones acérrimas, convencidas de sobradas razones para ser impuestas al mundo entero que autorizaban el uso de la fuerza para conseguirlo. Una de las visiones ha permanecido en su posición y otra se ha retirado. La primera, al retirarse su enemigo, se replanteó su modo de operar. ¿Tenía sentido mantener el andamiaje físico de la puja si ya no existía oposición dispuesta a disputar el dominio en esos términos materiales? En realidad se hizo la pregunta pero arribado a la instancia de la respuesta, sus condicionamientos no le permitieron aligerar sus dispositivos de defensa: con mínimos cambios siguió manteniendo y aumentando su inmenso reservorio de coerción.

La otra, retirada ya de toda actividad combativa, optó por una sumisión histérica, plegedándose a la religión de la victimización y el pataleo. Al no poder conquistar el terreno de la física material, se conformó con la conquista del campo de la ilusión, del lenguaje, de las construcciones simbólicas, y de la excelencia moral. Acatar el mandato burgués en el silencio pasó a ser visto como una miserable mueca de complicidad; en cambio acatar bajo el estruendo de la protesta, con el paroxismo de la negación pasó a ser muestra de la mayor altura moral, del compromiso con los más nobles ideales sociales, con el mayor grado de cultura y sensibilidad humana. Pero no existe refugio inmanente alguno para el deseo al que podamos regresar, jamás existió uno. Y el refugio de los heroísmos del discurso apenas dispone de los recursos migajas que el sistema coercitivo descarta por inoperantes y costosos.

La metafísica del deseo -¿un “anarquismo”del deseo? - deleuziano es un escape a un mundo ilusorio, un mundo ideal e inmaterial. Es análogo a la religión, la diferencia es que la religión es una fuga ideada desde el poder para consolar y ayudar al disciplinamiento, en cambio el campo "metafísico", más allá de su sana ilusión de regreso a una etapa existencialmente "autónoma", es una fuga desde la esclavitud, desde la opresión para consolarse, suponiendo un estado de la sociedad adolescente ideal e incompatible con la naturaleza humana, y de ahí es que sea captada por el poder dado su efecto esterilizador del ímpetu transformador, que desvía las fuerzas rebeldes acostumbrándolas a identificar “cambio” con “imposible”, lo que concluye ayudando a la disciplina de conservación aunque reniegue de ella. De los hechos al discurso; del materialismo diálectico, al idealismo metasubjetivo.


noviembre 21, 2009

Imposibles regresos


Puede que Macri no regrese con vida política del destape de su siniestra costumbre de espiar. Verlo y oír sus excusas vanas comenzará a pronto a producir un malestar insoportable.

Y la televisión abierta argentina no debiera regresar de Ricardo Fort. Zulma Lobato fue un inductor al abismo, lo de Fort es la consagración superestructural de lo vomitivo como tragicomedia. Rápido un sociólogo de guardia que analice semejante hito semiótico en la era del capitalismo que aparece imprevistamente en una sociedad del tercer mundo. Puede ser la primera ficha de un dominó universal imparable.



noviembre 17, 2009

Homenaje a Báñez


24 de noviembre a las 19 hs., en Eterna Cadencia:

Homenaje a Gabriel Báñez
y presentación de Posted by (selección de textos de su blog Corte y Confección, publicados por La comuna ediciones)

Participan:
Juan Sasturain, Martín Kohan, Marcos Rodríguez, Iván Maidana

Importante: Se entregarán ejemplares de Posted by entre los concurrentes de manera gratuita. Al final, brindis con buen vino, no hace falta que traigan, ¡lo conseguimos!

Auspician: Secretaría de Cultura y Educación / Municipalidad de La Plata – La comuna ediciones.

Organiza: www.nacionapache.com.ar

Eterna Cadencia
Honduras 5582 – Palermo – Buenos Aires

noviembre 15, 2009

El secreto de nuestra mediocridad







A principios del siglo XXI parece mentira que tengamos que volver a mamar la esencia del fútbol de la mano de la hispanidad del balompié.

Vaya si los partidos amistosos sirven. Este de ayer frente a España a mi por ejemplo me sirvió para descubrir lo que tal vez sea el gran secreto a voces de nuestra pobreza futbolística actual.

Me explico.

El dispositivo clave y esencial en la generación de fútbol de un equipo en esta era recibe el nombre de MEDIOCAMPO. También llamado -si lo expresamos en un sentido más funcional que geográfico- línea de volantes, entramado de gestación de fútbol, usina generadora, bloque compacto, etc.

España dispone de una serie de jugadores de fútbol en el centro de campo, es decir, futbolistas capaces de jugar, crear, definir, defender, retroceder, bloquear, pasar la pelota, gambetear, avanzar, pisar el área, picar al vacío, definir. Iniesta, Xavi Alonso, Xavi Hernández, Fábregas, Bousquets, Senna, nombrando los que jugaron ayer y vienen jugando desde la Eurocopa 2008.

Argentina no tiene jugadores de fútbol en el medio campo. Desde hace tiempo a esta parte el concepto dominante en nuestro fútbol ha reducido y atomizado esta tarea en especialistas parciales e incompletos. En primer lugar, nuestros mediocampos se han auto impuesto la obligación de tener lo que llamamos jugadores número 5 (cinco) o “cincos”; también llamados medio campistas tapón, de contención, de garra, "recuperadores de pelotas" y otras denominaciones. En general se trata de picapiedras sin ambiciones ni habilidades para jugar ni llegar, limitados a lo sumo a la gran habilidad de dar un pase lateral decente. Dentro de esa cuota obligatoria se ha puesto de moda no tener sólo uno sino dos “cincos”; es el colmo de los colmos: dos jugadores limitados que ocupan el 50% de las plazas del mediocampo, y cuya prestación viene estrictamente acotada. El "cinco" y el culto a los "cincos" representa el conformismo de la pobreza en el fútbol; la imposición de la mediocridad como referencia. En el gusto argentino para ser gran "cinco" basta con marcar, tapar, cortar y dar algún que otro pase bien; con eso alcanza. Asi nos va. Los hay directamente toscos y aguerridos como el sobrevaluado Mascherano, y fiolos y carilindos como Gago –heredero del fiolo de los fiolos que fue Fernando Redondo, rey de los facheritos calesiteros e inútiles- pero siempre incapaces para todo otro servicio que no sea marcar un poco a veces y pasarle siempre el problema de jugar a otro. Argentina se convirtió en una fábrica de cincos. Hasta se dijo que el equipo era "Mascherano y 10 más". Asi no va.

Los dos puestos restantes del mediocampo quedan reservados a los “carrileros”; volantes corredores que van por la banda, pero de jugar y conectarse ni hablar. En general no es que no sepan jugar, a menudo tiene bastante más habilidad que los "cincos", saben llegar al área y meten goles pero el tema es ¿con quién juegan si al lado tienen a dos señores orgullosos de su intrascendencia y atrincherados en torno a su autorización a "no jugar" como son los "cincos"?

Existe otra variante, igualmente nefasta, que es reducir los dos "cincos" a uno, dejar los corredores laterales y poner un “enganche”. Así se le llama aquí a otro fiolo que por lo general es bastante exquisito y pecho frío, al que le encargan hacerse dueño del equipo y de todas las pelotas aunque sea para tocarla y tenerla un poco. Un jugador que se dedica a tocar todas las pelotas que circulan como si fuera obligatorio, y deambular por el medio para tratar de dar algún pase genial a los delanteros. Obviamente facilitando la marca del rival ya que le basta con tapar a ese jugador para anular el juego de todo el equipo.

Cuando nos vamos a dar cuenta que que debemos armar una trama de JUGADORES en el medio campo, a lo sumo tolerando la presencia de un "cinco" pero obviamente con mejores atributos que el tosco Macherano y el intrascendente Gago. España es un ejemplo a mirar, un medio campo donde hay jugadores conectados capaces de hacer todo junto lo que los argentinos hacen por pedacitos.

noviembre 12, 2009

Los ladrillos de Berlín I


Esto ha dicho Eric Hobsbawm en una conferencia reciente:

“El “Siglo breve”, o XX, fue un período marcado por un conflicto religioso entre ideologías laicas. Por razones más históricas que lógicas, fue dominado por la contraposición de dos modelos económicos – e incluso dos modelos excluyentes entre sí –: el “Socialismo”, identificados con economías centralmente planificadas de tipo soviético, y el “Capitalismo”, que cubría todo el resto. Esa contraposición, aparentemente fundamental, entre un sistema que ambiciona sacar del medio del camino a las empresas privadas interesadas en las ganancias (el mercado, por ejemplo) y uno que pretendía liberar al mercado de toda restricción oficial o de otro tipo, nunca fue realista. Todas las economías modernas deben combinar público y privado de varios modos y en varios grados, y de hecho hacen eso. Ambas tentativas de vivir a la altura de esa lógica totalmente binaria, de esas definiciones de “capitalismo” y “socialismo”, fallaron. Las economías de tipo soviético y las organizaciones y gestiones estatales no sobrevivieron a los años ´80. El “fundamentalismo de mercado” anglo-norteamericano quebró en 2008, en el momento de su apogeo. El siglo XXI tendrá que reconsiderar, por lo tanto, sus propios problemas en términos mucho más realistas”



Estas conclusiones resuenan por su obviedad de sentido común, en apariencia, a uno que viene contaminado de tantos análisis semánticamente intrincados a solo efecto de suplir su vacuidad o su indeterminación. Es que la popular idea del equilibrio de los opuestos, la combinación de entes diferentes y antagónicos que le dicen adiós al ansia de plenitud para aceptar resignados el reino de la impureza, pareciera haber perdido prestigio ante la abrumadora simplicidad de su expresión. Pero si algo tiene lo obvio, lo que salta delante de los ojos, es que antes ha estado oscurecido, y esa deglución sencilla es el verdadero acto iluminador del pensamiento.

Se hace difícil de refutar el razonamiento que establece que los sistemas puros suelen asuntos propios del campo ideal, de comportamiento amigables en el laboratorio de las ideas, en el campo de juego conceptual de los principios; y son los sistemas impuros los que efectivamente muestran aptitudes para sobrevivir en el campo de lo real, en la dimensión verdadera de su funcionalización social. Todo intento por llevar la pureza de los modelos ideales al campo real han devenido en fracasos o catástrofes humanas. ¿Esto significa arriar la bandera de las utopías radicales? Nunca como antes debieran mantenerse en alto, pero las que si resultan intolerables a esta altura son las utopías con error de diagnóstico acerca de cómo resultan las cosas en la praxis de la refriega humana.

Los sistemas mixtos acogerían correctamente en sus variables la invulnerable realidad del combate de las fuerzas humanas en su accionar de interacción vital. Asumirían por naturaleza la consecuencia de la imposibilidad de imponer un modelo totalista tal como lo indican los propósitos animados por la pureza. Para un capitalista por ejemplo, el ideal sería un sistema donde la ganancia no tuviera oposición ni pagara costo alguno, que fuera la máxima obtenible en las ecuaciones abstractas de laboratorio, pero eso no se verifica en la realidad donde los números la consecuencia del funcionamiento “sucio” de las variables. El sistema planificado, aparte de suprimir las libertades por debajo del umbral respirable, necesitaba dar cuenta de todo en un nivel imposible de limpieza, porque la falla no era parte de su círculo virtuoso de mantenimiento y reproducción.


noviembre 10, 2009

Imprevisión de la naturaleza



El Uno interrogaba al viento y a su hermana la tempestad.

-Señor, señora: tantas calamidades que ustedes le han provocado a los hombres que pueblan la tierra ¿no tienen miedo a sus represalias, tan vengativos que son?

-Yo soy libre –dijo el viento- y tan solo sigo mi camino, no le hago mal a nadie a propósito, pasé siempre donde tuve que pasar desde que existo. No es mi culpa si aquellos que mencionas se anduvieron interponiendo en mi camino…

-Lo mismo digo –dijo su hermana- aunque no gozo de la misma fama libérrima de mi hermano, y cierto es que soy un poco más selectiva y precisa en mis travesías, juro que jamás pasé por algún lugar que no me pertenezca…

Menos soberbia y más temerosa era la lluvia, y no por ello insensata. Un buen día, asustada, escapó a arrojar su fresca carga en algún vacío del cosmos sideral en vez de regarla sobre la tierra como lo hacía habitualmente; es que desde hace mucho tiempo venía temiendo las consecuencias de mojar a tanta gente irritable.


noviembre 09, 2009

Lapidación femenina a la brasileña





¿La alegre tolerancia en las costumbres no era solo brasileña? El último país donde hubiera pensado que pasaría esto es Brasil. Pero pasó. Una chica es casi lapidada públicamente en una unviversidad por asistir a clase en un vestido corto.


noviembre 02, 2009

Coalición cínica


Algunos malintencionados se propusieron poner en evidencia los avatares de la idea del silencio sobre mi desayuno, la explicación causal de la falla eléctrica de la inspiración de ayer. Acudo entonces a las imágenes de mi tacho de basura ideológico reciente, donde quedaron depositados los restos de los envases de mi última interpretación pasajera. Se trata de recomponer una vez más los pedazos disueltos en la previsible confrontación, los añicos obvios del desacuerdo desgarrador. ¿Pero como invocar semejante pretensión de agudeza ante la blancura cínica de la dentadura postiza de este decadente amanecer? Al límite de la enésima evacuación de mi departamento, dirigida a curtir mi rostro con aún más huellas percusivas de defraudación, arriba el esperado viajero a la parada.

"El combate ficticio entre dominados y dominantes, en vez de ser la causa de la inestablidad de un sistema, es la causa de su equilibrio"