Si al derecho a la libre expresión consagrado en la Constitución para todos los ciudadanos iguales ante la ley. Si al derecho a criticar a periodistas. Basta de castas ni privilegios para estos consignatarios de la realidad. Sus acciones pueden y deben ser criticadas como las que cualquiera Y no es aceptable ningún acto de represión ni intimidación contra la opinión popular. Que el pueblo siga golpeando cacerolas, armando pancartas, afiches, collages, litografías, posts, fotomontajes, panfletos, cánticos, mensajes metidos en una botella o lo que fuere si es que quiere expresar una opinión crítica de medios o de periodistas, o de quién sea. Obviamente que el límite son las leyes que regulan la expresión pública en relación a los derechos individuales y que deben dirimirse en la justicia. Pero un afiche que no incluya injurias y que sólo cuestione la independencia de ciertos periodistas, es una forma tan legítima de expresión popular como golpear una cacerola, hacer una marcha o entonar cánticos en una plaza. El periodismo tiene el derecho de bajar línea y lo hace con el apoyo de estructuras empresarias, si desea acusar de fachoprogresista a una persona lo puede hacer y puede "eschacharlo" en tapa con un uniforme nazi, entonces ¿por qué el pueblo no habría de tener derecho de hacer lo mismo con el periodista si fuese el caso?
1 comentario:
Oís???...
Estoy cacereolando!!!!!!!
Besote sonoro al rimto de las demandas!!!
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