El lugar donde he sido mandado a vivir sin ninguna experiencia previa en el medio de la más huérfana inconstancia. El que me obliga a tomar por sorteo hasta la más inocente de mis decisiones, como la de creer en la más pálida idea...

octubre 24, 2005

Un dulzón gustito a carne de cerdo

Mi amigo José Lagente elaboró estas reflexiones a manera de editorial sobre las elecciones de ayer en Hargentina. Cuando me lo encontré, aproveché para hacerle algunas preguntas:

- Me enteré que tenés blog, que bien che, decime, fuiste al Rojas ?
- No Tino, que tengo que hacer entre esa manga de trastornados de la cabeza, el mío es un website, no un blog, lo uso para pasar publicidad…
- Bueno, yo soy blogger también, está bien, es una forma de...




Carrió.

"Más allá de su solvencia intelectual y su habilidad para la retórica, el hecho crucial es que rodea de un insoportable halo apocalíptico a todas sus intervenciones opositoras. Una aureola mesiánica, una visión fatalista del mundo, del país y de los adversarios políticos. Siempre al borde del más inalcanzable de los heroísmos, de la epopeya más brumosa, del puro desgarramiento, de la salvación o la flagelación eternas. Su desesperación por denunciar el diluvio universal de mierda cósmica que ahogará en su pudrición toda reserva moral sobre la faz de la tierra, termina impidiendo la efectividad de poder al menos limpiar el pozo ciego que rebalsa en el patiecito del fondo. Es como esos gurúes que parecieran andar todo el día con una granada atada a su pecho, dispuestos a la ofrenda sacrificial de un harakiri explosivo. La denuncia sobre la cuenta de Olivera, por ejemplo, tuvo doble efecto gracias a la brutal repercusión que ella mismo le dio organizando una batifondística contradenuncia, sobreactuada, estertórea y payasesca –denunciar una operación de prensa en una comisaría!-. Tal desfloramiento de membranas vírgenes terminó provocando un efecto paradojal: muchos más terminaron creyéndola a la existencia de la cuenta de Olivera después de semejante reacción, que si no le hubieran dado bola con un simple rechazo como una mentira más de campaña. La inclusión de un figurón radical como Olivera, que traía recuerdos de nefastos pasados delarruisticos debió ser evaluada antes."

Macri.

“La gente está podrida de tragedias póstumas, de infiernos irrecuperables, de promesas de purificantes purgatorios y de conquistas de insondables paraísos. Existe una necesidad de un descenso a la cotidianeidad, a despertar el entusiasmo mínimo y posible de ver efectivizado algún deseo, aunque sea comprarse un vaquerito nuevo o ir a visitar al tío Pepe a Tandil. Frente a esto el discurso gerenciador de Macri, logra a través de su reiteración obsesiva, resultar hasta más humano y campechano que las demás amonestaciones demiúrgicas . “El ingeniero” aprovechó muy bien un efecto que en política no debe nunca ser subestimado, que es el de la contra-demonización. De tanto que un candidato es demonizado y estigmatizado por sus adversarios como la peor de las pestilencias ideológicas y humanas, y se lo ubica tajantemente en un plano de insalvable condición satánica, también se corre el riesgo de convertirlo en una especie de mártir urbano de la “gente común” que termina apiádanonse de él. Se victimizó hábilmente como blanco furibundo de la izquierdosidad fingida de sus adversarios hambrientos de encontrar en un enemigo, la expiación perfecta a sus obscenas carencias de propuestas. Retiró el discurso de campaña de lo que la gran mayoría de la gente no quería: que se atacara al gobierno. Era previsible una ratificación amplia del oficialismo que sólo en el delirio bíblico de algunos opositores estaba en duda. Macri la leyó y sabía que su estrategia no podía ir por ahí y debía quedarse en el contacto con realidades “de superficie”, adoptando el tono de su gestión boquense, esa que le sirvió de globo de ensayo psicosociológico para tratar de entender las reaciones de eso llamado “la gente. Se mostró comos siempre: hiperpragmático, conciliador, explicador y eficientista. Es que la gente lo que menos quiere en este país es que le rompan las bolas con los “sagrados valores”, así como votó en su momento a mansalva a Menem para conservar la couta de la licuadora, hoy pide que lo dejen al pingüino hacer la suya, que al final se todo se dan cuenta que no es tan mala, y se dejen de joder un poco con el fin del mundo.”

Escribió José en su blog “ Toda elección es una interna peronista”

Cristina y Néstor.
“Algunos hilos del pasado, tensados hasta el máximo de los límites para sacarles el jugo, parecen ya cortarse o no alcanzar para sostener más que pesos menores. Tal es la lección del PJ de la provincia de Buenos Aires: la apelación a la marchita y los símbolos peronistas no alcanza. Desde fuera del poder los aparatos se quedan sin recursos, no se puede pretender seguir ganando al juego clientelista cuando la caja la maneja otro. La ideología es lo que menos le importa a la gente, este es un país donde el tutti frutti es el gusto preferido. Y por algo se consolida este sistema político como la autarquía de un mono-movimiento donde convivieron y convivirán desde el más rabioso mandril neoliberal hasta el más crispado “zurdaje” con aires de correcta socialdemocracia europea en sus acrobacias económicas, y beligerante verborragia revolucionaria en lo retórico. Encima, el argentino, cuando se pone sentimental, se le da por sacar a ventilar el “orgullo nacional”, y el pingüi meta grito y declamación intentó al menos que la relación carnal sea a la antigua, es decir, te digo que no, no, no, por quién me tomaste…..???”


- Che viejo, tenemos que tomar una decisión, un cambio, dicen que si no se termina el mundo…se necesita un nuevo contrato moral…
La pareja actual de José es una mina con inquietudes culturales…

- Dejá de romper las bolas vieja y haceme el bife que tengo hambre…lo que se necesita es renovar el contrato del alquiler del kiosco, eso vieja, hablále vos a la dueña… y este verano por ay nos vamos una semanita a Marpla…

“Las llamas del jubileo menstrual
queman los subsuelos de su ínfima
pronografía doméstica…
Y entonces se declara el verdadero valor
de drogarse con unas salchichas con savora

Carbonizar los miedos bajo
el goce sádico de estrenar un pulovercito
Malversar las frustraciones
dejándole vencer su efecto alucinógeno

La felatio nocturna es una zumbante
ruleta yanqui de glamourosa celulitis
Y un asadito de ternera de feet-lot
eyacula sobre su lengua excitada
un dulzón gustito a carne de cerdo….”

4 comentarios:

paula dijo...

"manga de trastornados de la cabeza", buena definición.

Tino Hargén dijo...

Si, José Lagente suele dar definiciones muy precisas...

Unknown dijo...

la carne de cerdo es más nociva que la hierbabuena

Tino Hargén dijo...

y menos que la hierbamala...

Gracias y bienvenida Raquel, tu pagína es excelente.

Saludos