El lugar donde he sido mandado a vivir sin ninguna experiencia previa en el medio de la más huérfana inconstancia. El que me obliga a tomar por sorteo hasta la más inocente de mis decisiones, como la de creer en la más pálida idea...

junio 07, 2010

Perpetrar y perpetuar



Sobrevivir es negociar, punto de partida necesario para taparle la boca a cualquier héroe.

Arde, como arde, quiero quitarme lo ardiente del corazón que no me deja vegetar tranquilo en mi tristeza. Nunca pude luchar contra esto de ser un moderado, un mordido por la confusa dentellada de la indefinición. Nunca hay que dejar de buscar el fruto que el intelectual menesteroso suele dar cada nueva temporada. La inteligencia anda abollada por ahí como un pañuelo enmocado en el bolsillo. El inventario de ideas deja un puñado de monumentos-palabras como referencia: Libertad pero igualdad. Libertad pero justicia. Libertad pero paz. Libertad pero moral. Los herederos de la pobreza se acogen al derecho de existir con una consumición gratis por siglo.

-…Te digo la que hacen…Tratan de no ser el tonto que da pelea y pierde. Mejor es olvidarse y no pelear, construir el refugio de la indiferencia, una finca donde cultivar la negación y pasear perritos que se autogestionan el alimento...


Veo tan claro el recinto emancipatorio, las gruesas columnas parenterales que atraviesan la misericordia del llanto como tañido, la galería con vista al fuego eterno del mal. Antes de volverse Omnipotente y Ausente, dejó dos palabras a modo de manifiesto: perpetrar y perpetuar.


1 comentario:

Fernando Terreno dijo...

Es una sensación que he tenido muchas veces, y seguiré teniendo.
Pero, al llegar al final se me agregó a mi confusión propia la palabra "parenteral" y me estoy preguntando si no será parental.
Aunque pensándolo bien, podrían ir las dos; con la salvedad de que la columna no sea demasiado...