El lugar donde he sido mandado a vivir sin ninguna experiencia previa en el medio de la más huérfana inconstancia. El que me obliga a tomar por sorteo hasta la más inocente de mis decisiones, como la de creer en la más pálida idea...

marzo 18, 2012

El líquido elemento



"América del Sur posee tres grandes acuíferos: la Cuenca del Amazonas, la Cuenca del Marañón y el sistema acuífero Guaraní, que más parece un "mar subterráneo" de agua dulce que se extiende por cuatro países del cono sur: Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay. Por el volumen de las reservas de estos acuíferos y por la capacidad de reposición del agua de estos sistemas, América del Sur representa la principal reserva de agua dulce del planeta..."

¿Nos espera un futuro de grandes plantas extractoras, envasadoras y exportadoras de agua? Mónica Bruckmann analiza la centralidad del agua y las garras de los intereses internacionales que ya sueñan con transformarla en un nuevo commodity.

1 comentario:

Severian dijo...

Es poco creible que el agua pueda transformarse en un commodity.

1- No habría flota capaz de transportar desde Argentina el agua dulce necesaria para regar un campo de maiz en, digamos, España.

2- Y si solo se tratara de agua para consumo humano, hasta por el sequísimo Ebro fluye por hora cien veces más agua de la que se podría cargar en el buque tanque más grande del mundo.

3- Si el miedo es que la contaminación de las fuentes de agua dulce del primer mundo produzca interés en explotar ese recurso en el tercero, la economía va en contra: siemrpe será más barato refinar el agua, descontaminarla, que transportar a travez del océano los litros de agua necesarios.

El agua no es el petróleo, ni puede serlo. Si realmente las potencias están interesadas en el acuífero Guaraní, algo probable a la luz de su actividad en la triple frontera, será para explotarlo in situ, por ejemplo comprando u ocupando las tierras y sembrando alimentos que, esos si, luego serían transportados. No para llevarse el agua, sino para traernos los sedientos.