El lugar donde he sido mandado a vivir sin ninguna experiencia previa en el medio de la más huérfana inconstancia. El que me obliga a tomar por sorteo hasta la más inocente de mis decisiones, como la de creer en la más pálida idea...

junio 25, 2008

Arresto domiciliario

Los otros, ese magma del que nadie escapa
La red que te contiene es la que te atrapa

T.H.


Los bloggers, desde la melancolía ciclotímica de domadores anarcos, tan templados en la voluntad de hacernos fuertes en lo sórdido de una insolidaria manada de coyotes con un látigo deshilachado, seguiremos fundando colonias en los vacíos más insólitos, al mismo tiempo que veremos languidecer el horizonte.

Estamos tentados de creer que la decadencia de los procesos ilusorios es inevitable, pero las cosas tienen la maldita costumbre de empezar y terminar sin dejarnos ser los mensajeros de la novedad.

Imagino una convocatoria a todos los habitantes de la blogósfera en una plaza. Entonces salgo a un balcón de cara a la multitud y lo primero que digo es una pregunta a los gritos:


“Si alguien tuviera una buena idea ¿sería tan pelotudo de salir a quemarla en un blog?”

La respuesta tal vez unánime nos dará será la prueba de la esterilidad intolerable del blog que no alcanza a volverse una condena de cumplimiento efectivo pero si es un arresto domiciliario.


8 comentarios:

Κλεοπάτρα dijo...

El arresto domiciliario, es una condena de cumplimiento efectivo...sólo que lleva lo mejorcito de lo peor.

Creo que una buena idea la haría pública desde mi blog..¿Por qué no?...

Casi casi que siempre voy a preferir el cumplimiento de la pena que me corresponda, porque soy idiota y creo aún en los procesos ilusorios.

(Sólo que aún la idea no apareció)

Saludos

Tino Hargén dijo...

Hola Cecilia

La respuesta era la incógnita de este juego. En lo de cumplir yo te sigo, pero mejor cumplamos sólo la condena y la pena la dejamos para los demás...aunque lo refutemos a Don Ata...

Besos

Κλεοπάτρα dijo...

jajaja

Yo sabía que algo estaba dejando sin resguardo en mi comentario.

Bien, ¡¡¡lo tuyo es exquisito!!! (y te felicito)

Pero lo mío, es de buena fe porque podría contestarte que la condena es el cumplimiento (efectivo o no) de una pena.

...pero eso es chicana y no quiero;)

Beso

inx dijo...

Y...sí. ¿Cómo saber cúal es una buena idea? Hay que tomar el riesgo de lanzarla, inevitablemente.

Tino Hargén dijo...

Cecilia: Touchéé!!!!!!!! Me embocaste con esa...estamos explotando el ronroneo psicosemiótico entre penalidad y pena, punición y dolor, otra que Foucault y Lacan! jeje

Inx: Y si....por ahi encontramos un forma de saberlo: la buena idea es, de todas las que tiraste, aquella que pasó más desapercibida en un blog ;-)

Κλεοπάτρα dijo...

¡Ésto me está gustando mucho!...no sólo ronroneamos psicosemióticamente entre pena y penalidad, dolor y punición (cambié el orden ex profeso)jugando a jugar con Lacan y Foucault, sino que agregamos la esgrima por lo que veo...

¿Será un deporte nomás?:P

Beso

Tino Hargén dijo...

Eso es... los motores psicosemióticos entran en régimen. ¿Deporte? Todo acto donde haya algo para ganar o perder es un deporte, entonces todo es un deporte, con ese contenido de farsa que encierra porque a la vez es un juego pero de su resultado depende la vida o la muerte.

¿Esgrima? Es un lugar común eso de que un debate entre dos personas por ejemplo es "una verdadera esgrima verbal". De ahí viene que cuando se ofrece un argumento en la contienda se le suele llamar "esgrimir".

Κλεοπάτρα dijo...

La vida o la muerte no dependen de un juego, existen mucho más allá de cualquier deporte verbal.

Cuando jugamos a ganar o perder no recordamos que siempre fracasan nuestros argumentos, porque la muerte instaura sus metódicos y crueles monólogos.