tag:blogger.com,1999:blog-14042773.post4949637958030506584..comments2023-11-03T09:18:41.918-03:00Comments on Hargentina: EL PRO en la cultura: relato y reflexiónTino Hargénhttp://www.blogger.com/profile/10448833672097169963noreply@blogger.comBlogger5125tag:blogger.com,1999:blog-14042773.post-74860944531093604242007-12-19T20:25:00.000-03:002007-12-19T20:25:00.000-03:00He leído con mucho detenimiento lo que expusiste y...He leído con mucho detenimiento lo que expusiste y a los antecesores, y creo fervientemente que la derecha (si por tal tomamos a la clase más aristocrática seguida de aquellos que no quieren perder beneficios..por eso de que pertenecer, tiene sus privilegios)sí consume cultura sin ánimo de lucro...para ellos...después, para su propio sostén de "estirpe" todo lo mercantiliza a los fines de trazar una línea, la de siempre.<BR/>A su vez, es importante recalcar que mercantiliza la cultura que consumen, totalmente ajena a nuestras raíces y miran con desdén, con asqueroso desdén las creaciones culturales masivas.<BR/>El fin de la derecha, siempre, es destruír las identidades regionales.<BR/>Un abrazoΚλεοπάτραhttps://www.blogger.com/profile/18220388510622564630noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-14042773.post-49297346353298195862007-12-19T18:19:00.000-03:002007-12-19T18:19:00.000-03:00A mi modo de ver, la gestión de Macri en la ciudad...A mi modo de ver, la gestión de Macri en la ciudad probablemente sea mejor y en muchos sentidos más progresista que los engendros del "progresismo" oficial porteño, que lo único "progresita" que ha hecho, a lo sumo, es repartir condones. Desde el punto de vista cultural (en el sentido ministeril), el "economicismo" del macrismo sirve a corto plazo para blanquear que en varios aspectos "cultura" en la ciudad ha sido el nombre de una política de subsidios a una serie de consumos de una zona de la clase media. <BR/><BR/>El horror, el mío al menos, no es al gobierno de macri, sino al macrismo como corriente espiritual, como sintonía con ciertos talantes reaccionarios imperante en las ciudades. O sea, lo desagradable es que se convierta en ideología de un gobierno nacional. Ni siquiera tienen que sentarse en el sillón de rivadavia. En Europa, por decir algo, la nueva derecha no tuvo que "tomar el poder" para que se sucedan una inmensa batería de legislación racista. En la Argentina basta pensar en los retrocesos que implicaría en la reforma del poder judicial, de la policía, etc.. Abrazos, Fabián.wertehttps://www.blogger.com/profile/05697964910896890129noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-14042773.post-81842821856859101012007-12-19T11:32:00.000-03:002007-12-19T11:32:00.000-03:00Hola AlbertoAdjetivar cultura daría para todo un e...Hola Alberto<BR/>Adjetivar cultura daría para todo un ensayo. En el marco de este breve artículo sólo enfoqué algunas aristas. En cuanto a tus observaciones yo creo que no es lo mismo la derecha liberal cuando actúa en cultura en el marco de una concepción de la política y del estado, que comportamientos particulares de la “clase alta” en cuanto a su forma de cultivar los bienes más reputados de la cultura como la música clásica, los cuadros o las esculturas; bienes que se asocian a su condición de clase. La frase mía que citás creo que no se desmiente con los ejemplos que das. La derecha liberal mira a la cultura desde un espejo deformante ligado a su propia filosofía de asignación de valores donde la ley fundamental es el fin de lucro; un pianista o un pintor top se forman para ser exitosos en un determinado mercado top ya establecido, para ofrecer el mejor producto top demandado y hacer fortuna; les importa un carajo si eso contribuye a ampliar los horizontes del arte musical. Eso no quita que haya contribuciones individuales valiosas a institutos de excelencia cultural, especialmente en Estados Unidos y Europa, pero no responden a una concepción política en la que el estado deba interesarse en la gestación social de la cultura, y repito que no estoy hablando desde una concepción asistencialista ( “el tallercito de teatro en el barrio para dar contención a la gente humilde”) sino de una que apunta al mismo tiempo a un ideal de máximo desarrollo, difusión y calificación en todas sus etapas. <BR/>Patrocinar un grupo de música clásica, una muestra de arte o becar al nene prodigio que toca a Bach a los 5 años no son referencias que indiquen algo diferente en su concepción de la cultura en cuanto a política de estado. <BR/><BR/>Saludos<BR/>Y gracias por leer y comentarTino Hargénhttps://www.blogger.com/profile/10448833672097169963noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-14042773.post-66689087009548351822007-12-19T03:25:00.001-03:002007-12-19T03:25:00.001-03:00Este comentario ha sido eliminado por el autor.Unknownhttps://www.blogger.com/profile/05872742675944598825noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-14042773.post-73755107883044078832007-12-19T03:25:00.000-03:002007-12-19T03:25:00.000-03:00desde mi experiencia, tendrías que adjetivar un po...desde mi experiencia, tendrías que adjetivar un poco mas la palabra ¨cultura¨. Históricamente, y creo que en casi todo el mundo, la derecha, especialmente la que es de clase alta, tiene un acceso asiduo a ¨la cultura¨, desde la ópera hasta el teatro, desde el cine hasta los conciertos, desde el ballet hasta charlas y museos.<BR/>Vos citás ¨La derecha no entiende, no le entra en la cabeza que algo pueda hacerse por otro fin que el de lucro¨, pero eso no es necesariamente algo cierto. Se ve en conciertos del Mozarteum, en mecenazgos, etc.<BR/>Me parece que lo tuyo está mas dirigido a la cuestión del acceso a las actividades culturales como algo que el estado brinda los ciudadanos. La pregunta que se hace la derecha podría ser ¿por qué pagaría el estado? o ¿para que gastar en estos que igual no van a entender la cultura de verdad?<BR/><BR/>saludosUnknownhttps://www.blogger.com/profile/05872742675944598825noreply@blogger.com